miércoles, 12 de abril de 2017

Business

Letrero sobre km. 81 Carretera a Sensuntepeque

Sí, todos soñamos, lo que pasa es que al despertar no recordamos esos viajes, que nos llevan tan lejos, a situaciones tan confusas e irreales. Sin duda algo pasa con los sueños, qué son realmente, los interpretamos, para qué...

O será como decían los toltecas, que asumimos la “realidad” como un sueño colectivo y que hemos llegado a esto mediante acuerdos.

De lo que no tengo duda es que la vida misma parece un sueño, un espacio, un momento, un viaje, la vida sigue siendo esa perrita blanca que te sigue a todas partes.

Pero no quiero hablar de esos sueños, sino de los otros, de los anhelos pues. De esos proyectos en los que trabajamos y que nos satisfacen tanto porque nos damos cuenta de lo valiosos que somos.

Yo tengo una casa, con la característica de la sustentabilidad, mi casa de habitación donde también ahora opera mi business. Vengan a conocer de qué se trata Tamarindo, casa sustentable

Cenizos a $3.00 y Rosas grandes a $3.50

Si vienen en paz pueden pasar. Así decía Jorge Amado, el autor brasileño de Doña Flor y sus dos maridos: Se vein em paz pode pasar. He puesto esa frase en la puerta de mi casa, que ahora está abierta al público por un ratito, un rato y por toda la noche.

Tamarindo, casa sustentable, ahora es vivero, café y hostal. Espero que mis clientes vengan en paz, ganármelos desde la entrada con ese mensaje porque si no vienen en paz quizá aquí puedan encontrar un poquito.

Este negocio nace de un sueño, se ha planificado y ahora comienza a realizarse. Es un proyecto que se rige bajo Dragon Dreaming y como ahí es descrito espero llegar a la culminación y celebrar con todos.

Siempre he pensado que tengo una veta de negocios y estoy listo para emprenderlos. Venga a ver lo que hago, venga a desconectarse del wifi y a conectarse con la naturaleza.

Qué tal un cafecito y luego reposar en aquellas hamacas.

Pero bueno vamos a lo práctico, las plantas son pocas pero hay variedad, tengo matitas de Romero y Hierba buena a $1.50. Rosas, Limones, Naranjas, Mangos, Guanabas, Paternas, Ixoras, Veraneras, Tuyas, Mandarinas… la mayoría a $3.00. Abono orgánico a $1.00 y Macetas a $4.00.

El café es calidad guanaca y se los puedo hacer en cafetera eléctrica, italiana y en olla. Con refill al módico precio de $0.50 la taza.

Por el momento están habilitadas dos habitaciones: la suit presidencial y el cuarto de Heidi. La primera con cama matrimonial y la segunda con un lecho personal pero con la cualidad de estar hecha con piso de madera y paredes de bambú.

Se trabaja en la ambientación de un dormitorio colectivo hasta para cuatro personas en camarotes dobles. El precio de apertura es de $5.00 por día y por persona. El check in a partir de las dos de la tarde y Chekc out a las 11:00 a.m. Una toalla tiene un costo adicional de $1.00.

Así que ya no hay excusas, están todos invitados a conocer Tamarindo. Vengan de paso y se llevan una planta, vengan un rato para tomar café y platicar o vénganse unos días y vivan una experiencia con enfoque sostenible.

El cuarto de Heidi, aclaración: la cama no es de paja!

P.D.: Estoy preparando todo para hacer pan y pizzas un día a la semana. Pregunte también por clases de yoga y capoeira (clase experimental gratis).